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¿Tiene sentido la Honestidad?


Deseo compartir con mis lectores, una historia publicada por Raúl Cadena Cepeda, en la pagina http://sistemas.cgever.gob.mx/2015/. La historia dice:

Frente a la taquilla de un cine, está un mensaje que dice: "Niños menores de 5 años no pagan boleto."

Una madre en compañía de su hijo, de 5 años de edad, solicita dos boletos a la taquillera.

“¿Qué edad tiene el niño?” Pregunta la empleada del cine

“Cinco años”, responde la madre

“Parece menor. Si usted me hubiese dicho que tiene cuatro, yo no me habría dado cuenta y usted sólo pagaría un boleto”, le responde la taquillera

“Usted no se habría dado cuenta, pero él, sí”, responde muy orgullosa la madre del pequeño

Esta corta e impactante historia, es muy útil y aplicable a nuestra realidad venezolana. Nuestro país, un hecho lamentable y digno de hondas reflexiones y rectificaciones, ha ido ascendido enormemente en los niveles de corrupción, tanto en instituciones públicas y privadas, como en los habitantes de nuestro territorio.

Los hechos de corrupción y deshonestidad, se han hecho frecuentes, masivos, generalizados y hasta Aceptados por nuestra sociedad. La administración pública está plagada de hechos de corrupción, generando una enorme ineficiencia en el uso de los recursos públicos, destruyendo la moral y honestidad de los empleados y funcionarios de los diversos entes públicos. La actividad privada, lastimosamente, también está contaminada de hechos alejados de la honestidad y los valores éticos, afectando el adecuado funcionamiento de tales entes y organizaciones. Para colmo, también en la población he permeado ese terrible virus y nos ha llevado a observa, a diario, hechos de corrupción en las más diversas actividades de nuestro quehacer cotidiano.

¿Hasta cuándo soportaremos esta generalizada corrupción? ¿Vamos a permitir que nuestro país se destruya por completo, en sus bases morales? ¿Qué esperamos para reaccionar de manera contundente y aleccionadora?

La educación resulta clave en estos casos. De la misma manera que la ejemplar madre de nuestra historia de hoy, quien les da una lección a la taquillera y a su amado hijo, del mismo modo TODOS los padres, familiares, maestros y ciudadanos de esta nación, debemos dar contundentes pasos para rectificar esa vergonzosa realidad

Los estudios gerenciales, evidencian que la corrupción ocurre cuando se dan estas condiciones:

1. Existe abundancia de recursos

2.-Los procedimientos son muy flexibles y los administradores no se ven obligados a rendir cuenta de sus actuaciones.

3. No hay contundentes sanciones para quienes cometen hechos de corrupción

4: La sociedad es suave y permisiva contra quienes cometen actos de deshonestidad

Lastimosamente, hecho abrumadoramente vergonzoso, en Venezuela tenemos las 4 condiciones presentes. Todos sabemos que hay una enorme cantidad de recursos, especialmente en la administración pública, provenientes de la renta petrolera. Esos voluminosos recursos, son administrados con mucho desorden, discrecionalidad y carentes de adecuados controles en los diversos entes oficiales.

Tampoco tenemos severas sanciones a quienes incurren en hechos de corrupción. Abundan los funcionarios con niveles de vida, propiedades y volumen de gastos personales, que en nada coinciden con sus ingresos salariales, por los cargos que ocupan.

Finalmente, la sociedad venezolana ha sido demasiado permisiva y hasta indiferente ante esos funcionarios que cometen hechos de corrupción.

Todo eso, ha hecho que progrese a niveles asombrosos los hechos de corrupción oficial, unido a muchas actividades privadas que se asocian con estos funcionarios y agrandan esos hechos inmorales.

Los habitantes del país se han sumado a esta ola de corrupción y podemos ver a diario, muchas actuaciones alejadas de la honestidad en la vida cotidiana

¿Cómo se corrige semejante corrupción generalizada?

Esto requiere la participación de TODOS los ciudadanos del país. Es demasiado grave y generalizado, para pensar que simples campañas o llamados a la población, se corregirá esa enfermedad social

Lo primero que debemos reforzar es la educación. Educar sobre valores, con más fuerza y eficiencia. En todas las instituciones y niveles educativos, se tiene que incorporar materias y contenidos relacionados con la honestidad y valores

Finalmente, apreciados lectores, debemos incorporar en las instituciones, publicas y privadas, severos procedimientos para mejorar el control de los recursos

También se deben aplicar SEVEROS castigos y sanciones a los responsables de estos hecho

Combatir la corrupción es PRIORIDAD NACIONAL

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